Presentación

El Estado de Chile ha intentado permanentemente responder a las crecientes demandas ciudadanas de mejores servicios públicos a través de la reestructuración, modernización y digitalización de parte de éstos, lo que podría ejemplificarse en distintos hitos claves, como la creación del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, el Servicio de Impuestos Internos, las Oficinas de Informaciones, Reclamos y Sugerencias (OIRS) en distintos servicios, la Dirección de Compra y Contratación Pública (ChileCompra), el Sistema de Alta Dirección Pública, ChileAtiende, entre otros.

Teniendo presente aquello, el desafío es mayor y más complejo sobre cuáles son las nuevas y mejores formas de crear y entregar valor público, y desarrollar mecanismos para hacerlo. De esta forma, la innovación se sitúa como un poderoso medio para abordar los distintos desafíos que se enfrentan, además de una ciudadanía interconectada, con mayor acceso a información, mayores demandas de participación en el sistema político y cuya confianza hacia el sector público disminuye progresivamente.

Actualmente, estos esfuerzos continúan siendo promovidos activamente por la agenda del Presidente Sebastián Piñera, quien planteó en su Programa de Gobierno la meta de contar con un “Estado inteligente, cercano e innovador al servicio de los ciudadanos”.

En esos términos, la innovación en el sector público –entendida como las prácticas que introducen nuevos enfoques en el contexto de una institución pública, los cuales no quedan sólo como ideas sino que se implementan, y cuya implementación genera mejores resultados públicos, en términos de eficiencia, efectividad y satisfacción de usuarios y funcionarios, es y ha venido siendo, una realidad en distintas instituciones públicas del país.

Pero, ¿qué se necesita para innovar en el sector público chileno?. Uno de los elementos son las “Capacidades para Innovar”. Basados en un estudio inédito desarrollado por el Gobierno de Chile y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) sobre capacidades y preparación institucional para innovar en el Estado chileno, el concepto de “capacidad” comprende las siguientes tres dimensiones: competencias, motivaciones y oportunidades.

En este contexto, el Concurso Funciona! – iniciado el año 2012 como Desafío Innovación-, responde a la necesidad de promover la innovación en el Estado desde los propios funcionarios públicos. Por ello, para el Servicio Civil esta instancia representa una oportunidad para que las instituciones promuevan la creación y/o implementación de acciones innovadoras que nacen desde los(as) propios(as) funcionarios(as) como una práctica que considere las necesidades actuales de los usuarios-ciudadanos, y a su vez utilicen este espacio de reconocimiento y revalorización de la función pública como un motivador del desempeño y de ambientes laborales desafiantes y que enriquecen el trabajo cotidiano.

Objetivo

El Concurso Funciona! en adelante “Concurso”, “el Concurso” o “ Funciona!”, es liderado y organizado por la Dirección Nacional de Servicio Civil, en adelante indistintamente “Servicio Civil”, con la colaboración del Laboratorio de Gobierno. Consiste en un reconocimiento a la capacidad de innovación reflejada en iniciativas diseñadas e implementadas por los(as) servidores(as) públicos(as) en sus instituciones, entendiendo la innovación pública como: “nuevas ideas que crean valor público para las personas” (OCDE, 2015).

Por su parte la Carta Iberoamericana de Innovación en la Gestión Pública, aprobada por la XIX Conferencia Iberoamericana de Ministras y Ministros de la Administración Pública y Reforma del Estado, define a la innovación en la gestión pública como: “el proceso de explorar, asimilar y explotar con éxito una novedad, en las esferas institucional, organizativa y social, de forma que aporte soluciones inéditas, originales y creativas a los problemas y permita así responder de manera óptima a las nuevas y tradicionales necesidades de los ciudadanos y de la sociedad.” (https://clad.org/wp-content/uploads/2020/10/Carta-Iberoamericana-de-Innovacion-10-2020.pdf).

En este contexto, las iniciativas a postular podrán ser tanto acciones que mejoran la productividad institucional (eficacia y eficiencia), como acciones que mejoran y/o impactan los indicadores que responden la calidad del servicio a la ciudadanía.

Asimismo, a través del concurso se busca revalorizar la función pública a través del reconocimiento y difusión de las iniciativas presentadas, y a la vez, fomentar una cultura de innovación al interior de todos los organismos gubernamentales.